¿Qué relación existe entre las emociones displacenteras y los atracones de comida?.
¿Alguna vez te has encontrado en la cocina, tarde por la noche, buscando algo de comer, incluso cuando sabes que no tienes hambre?.
No es solo comida lo que buscas, es algo más. Tal vez consuelo o un poco de calma en medio del caos.
Si esto te suena familiar, este contenido es para ti.
Vamos a explorar las verdaderas razones que te llevan a tener atracones de comida, a intentar silenciar tus emociones con ella, y cómo el estrés, la sobrecarga o incluso el perfeccionismo, te empujan a buscar un refugio en algo que, aunque parece una solución, solo te hunde más en el vacío.
Quédate hasta el final, porque voy a ayudarte a comenzar a salir de este ciclo de los atracones de comida.
Los atracones de comida y las emociones
Voy a contarte una pequeña historia.
Hace poco, una paciente me dijo: “France, siempre he sido de esas mujeres que pueden con todo; con el trabajo, la casa, la familia y mil cosas a la vez, pero últimamente, cuando todos se van a dormir, me encuentro frente al refrigerador o frente a la alacena, y no entiendo por qué, no puedo parar de comer aunque no tenga hambre”.
Escucho constantemente este tipo de historias de pacientes. Comer no siempre tiene que ver con el hambre física. A veces, la verdad es que comemos para llenar vacíos emocionales.
Comemos para tapar “ruidos” que no queremos escuchar, como por ejemplo:
- El estrés de un día interminable,
- La autoexigencia de querer hacerlo todo perfecto,
- La sensación de que, a pesar de tanto esfuerzo, nunca es suficiente lo que hacemos ….
Y en lugar de enfrentar este “ruido”, lo tapamos teniendo atracones de comida.
La comida se convierte en un alivio y el comer, en un tiempo de desconexión durante el cual nos olvidamos de todo. Sin embargo, ese tiempo de “disfrute” en que sucede el atracón de comida, no dura por mucho tiempo, ya que luego viene la culpa, como una ráfaga o un tsunami.
Y entonces, el ciclo de los atracones de comida comienza una y otra vez.
Aquí un dato curioso, que creo no conoces.
El 75% de los atracones de comida no tiene que ver con hambre, sino con emociones no gestionadas.
Y la comida se convierte en un parche temporal para un problema que va a seguir ahí, esperando a ser atendido.
Atracones de comida: identificando las dificultades emocionales que queremos llenar comiendo
Te invito a hacerte esta pregunta, con la mayor honestidad:
¿Qué estás buscando realmente cuando comes de más?.
A veces, detrás de un atracón de comida está la necesidad de:
- Sentirte menos sola (considerando no solo la soledad física, sino también la soledad emocional),
- Calmar el “ruido interno” de tu mente que te dice: “no lo estás haciendo suficientemente bien” ,
- Lidiar con el aburrimiento,
- Gestionar otras emociones displacenteras o bien,
- Darte un respiro, porque nadie más parece darte el permiso para hacerlo.
Una paciente solía decirme: “Fran, me doy cuenta de que como más cuando siento que no puedo fallar y cuando siento la necesidad de ser perfecta. Es decir, que cuando la presión que siento es tan grande, necesito soltar algo”.
La comida nunca será suficiente para llenar vacíos.
Comer para llenar vacíos emocionales no funciona, porque lo que buscamos no está en el plato, en el paquete de galletas, en el refrigerador ni en la alacena.
La solución para los atracones de comida está en aprender a enfrentarlos, en buscar y saber cuáles son las habilidades necesarias para gestionar esas emociones displacenteras que te generan “ruido” ante situaciones que no has resuelto y con las que, tal vez, puedes llevar años.
5 consejos para evitar atracones de comida y enfrentar emociones displacenteras
En el episodio 2 de tu 🎙️Podcast Aprende a Vivir Sin Atracones, te comparto 5 consejos que puedes poner en práctica para comenzar a evitar atracones de comida, a la vez que vas enfrentando tus emociones displacenteras.
Mira el VÍDEO que está debajo.
¡Que lo disfrutes!.
Conclusiones
Recuerda que si comes para calmar tus emociones es porque aprendiste a sobrevivir de la mejor manera que pudiste en ese momento.
Ahora tienes la oportunidad de aprender nuevas formas más saludables y más conectadas contigo para enfrentar lo que sientes, y para que puedas comenzar a dejar atrás los atracones de comida.
Espero que esta información te haya sido útil.
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Nos vemos pronto,
Francela